Eres capaz de comprender frases y expresiones de uso frecuente relacionadas con áreas de experiencia que le son especialmente relevantes (información básica sobre sí mismo y su familia, compras, viajes, lugares de interés, ocupaciones, etc).
Sabes describir en términos sencillos aspectos de tu pasado y tu entorno así como cuestiones relacionadas con tus necesidades inmediatas.
Sabes comunicarte a la hora de llevar a cabo tareas simples y cotidianas que no requieran más que intercambios sencillos y directos de información sobre cuestiones que te son conocidas o habituales. Puedes dar recomendaciones y consejos.